Poema iluso

Poema iluso

28.04.18

Yo pelee con la muerte
que reconocí mía,
en ese punto propio,
ahi siquiera,
es justo sufrir por quien no ama;
de eso no puede salir amor.

Ya va a llegar el momento
de estar correspondido;
ahí donde calze el sentimiento
y potencie al Ser el otro.
Donde se duermen juntitos los cuerpos
tibios juguetones de cariño infantil.
Donde se parten viajes y recuerdos
compartidos pa construir un presente común.

Yo soy el alma de mi espíritu,
y en esta soledad,
la única que algo le recuerda de sí.
ESTAMOS SOLOS FRENTE A NOSOTROS
casi todos.

Pero llegará,
y tibios viajes con una seguridad
en sí y en el otro
cercanía que espanta la otredad
incluso de sí.
Comunión real.

Y toda la pena acumulada;
De la nostalgia sola
De lo torpe que nos vemos
De lo miserable patente en la idea de si
Y toda la rabia;
De no entender al resto
De no sentirse entendido
De la monotonía de la falta de pasión y sentido
SERÁ UN RECUERDO CONFUSO
Del que tenemos que aprender
Para construir y evitar.

CALMA

No es justo sufrir por quien no ama,
de eso no puede salir amor.

Soy culpable de sufrir y saber eso.
No es amor vivir a quien no ama,
por lo que,
qué sentido tiene mi amar?

Más que amor es un sufrir.

Es cosa de posicionarse racionalmente y con gracia.
Es mejor asumir,
y si se debe asumir,
hagamos lo mejor con ello.

Si pensar tanto
la obsesión perversa
Si sufrir y caer
en lo impotente del Ser
no aflora.

TRABAJA LA CIUDADELA INTERIOR
Tomar postura.

Yo Peleé con la muerte
que reconocí mia.
Frente a la muerte
vi mi vida muerta.

Y yo sentí
Fuerte
El tormento
El delirio de ver como todo moría
Frente a mi y burlonamente en orgia
            y DELIRO
P Á N I C O
el tiempo se distorsiona todavía
aun llevo una parte de mi muerto
SIENTO COMO SE PUDRE EL CRÁNEO
CON TODO LO VIVIDO.
Esta es mi pelea.

La veo, es la misma.
Esa mujer, mi vida, es un otro.

Su cabeza delira por otro.
Su cuerpo quiere despertar con otro.
Sentir el orgasmo con otro.

Como Dios al otro,
obsesionada.
Sumisa y debajo de él,
llora sola,
por una idea que no existe.

Ella es la misma,
mi vida,
donde estoy muerto.

Pero aun tengo
El alma de mi espíritu
y la ciudadela interior;
y la esperanza
de que llegara el dia.

Y aquí estoy,
entre ruinas y proyectos.
Vacilando.
Como siempre.
El amor que queda en mi.

En mi ciudad
mori un día .
La guerrilla interior
pelee.
Y seguí cantando.

OTREDAD CULIA:
VENCEREMOS!

Ya llegará la nueva vida y compañera
a mi ciudad.




UNO ES UN PRODUCTO DE SÍ MISMO, Y ESTAMOS ENTRAMPADOS.

Se puede tomar las riendas,
hay que posicionarse
fuera de la posición en la que nos dejamos.
Rompiendo la cadena,
entramos en otra,
pero hay que despabilarse
constantemente,
ver los patrones
que dibujan la normalidad
con la que hacemos el presente.
El Ser conjugara lo que nos estanca.
Consciencia.


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